El precandidato a gobernador por Cambia Mendoza, Omar de Marchi, se refirió al cierre de las dos plantas de La Campagnola en nuestra provincia y afirmó que si él fuese gobernador, la firma «no se hubiera ido» y criticó la falta de «presencia política fuerte» para que no suceda el traslado a San Luis.
«A mí la Campagnola no se me hubiera ido. Ha faltado presencia política fuerte para evitar que esas cosas sucedan. No es que cierra: se va a otra provincia. Ahí si falta alguna decisión en ese sentido», expresó este martes el intendente de Luján de Cuyo, en diálogo con un programa radiala.
De esta manera, el dirigente del PRO mendocino cuestionó de forma indirecta la falta de acción del gobierno de Alfredo Cornejo para evitar el cierre de las dos plantas ubicadas en el departamento de San Martín.
«Valoro lo que está haciendo el Gobierno provincial, pero no se le puede echar la culpa a la «macro» de un montón de cosas que suceden. Se puede hacer mucho desde la provincia independientemente de la macroeconomía», sostuvo De Marchi.
Por otra parte, consideró que «el tema del vino ha sido un ejemplo muy claro». «Se sale a plantear con la cosecha encima la creación del fondo anticíclico con supuesto sobrestock, y aun no saben cuál es el precio. Hace falta que Mendoza tenga una actitud más agresiva a nivel nacional y regional en posicionamiento para ganar ventajas hacia afuera», manifestó.
En tanto, aseguró que «las misiones comerciales que se han hecho son buenas, hay que comprender que las inversiones van a venir siempre que haya condiciones amigables. Es mucho lo que se puede hacer sin depender de la macro nacional».
Por último, también criticó la propuesta de su rival en la interna de Cambia Mendoza, Rodolfo Suarez, de fundar un nuevo banco provincial. Al respecto, indicó que «la creación del nuevo Banco de Mendoza es una propuesta más electoral que otra cosa«.