Diputados trata en sesión virtual la ratificación de los decretos con los que se declaró una amplia situación de excepción.
El gobernador, Rodolfo Suárez, tendrá hoy la vista puesta en la Legislatura. Desde las 11 seguirá atentamente el desarrollo de la sesión “virtual” de Diputados en la que se tratará la ratificación legislativa de los decretos 359 y 401 con los que el mandatario declaró a la provincia en emergencia sanitaria, social, administrativa, económica y financiera.
Pero el eje de la discusión será lo que prescribe el artículo 2, inciso C, del decreto 401: autoriza un endeudamiento equivalente a 10% del Presupuesto 2020. Ese porcentaje ronda los 19.244 millones de pesos ya que se calcularía sobre los gastos corrientes votados el 11 de marzo pasado que en las planillas de la pauta de gastos asciende a 192.442.139.691,35. A los fines del endeudamiento, la coma debería correrse un dígito a la izquierda.
La pregunta que cabría hacerse es si habrá quién le preste a la provincia y cuándo se completará el proceso de tomar un crédito. “Hoy no hay alternativa de financiamiento, los fondos del mundo se van de los mercados emergentes, vuelan hacia mercados con menos riesgo” explicó ayer el ministro de Hacienda Lisandro Nieri en radio Nihuil. La duda, entonces, es que si Suárez logra la autorización para endeudarse, dónde podrá hacerlo. ¿Organismos multilaterales de crédito? Tal vez, pero esos trámites llevan un tiempo largo de gestión.
El monto encierra una curiosidad: el endeudamiento con el que contaría Suárez sería similar al que pedía en el Presupuesto para dedicar a obra pública y que el peronista Frente de Todos le negó hace menos de un mes. El oficialismo pedía originalmente 300 millones de dólares que, a 65,7 pesos que cerró la cotización para la venta el lunes, da 19.710 millones de pesos.
Otro de los interrogantes es qué hará el peronismo, fuerza que viene rechazando todo intento de incrementar la deuda pública provincial. La diferencia con aquel momento es que el pedido que se clausuró hace 20 días era en dólares y para financiar un largo listado de obras. En esta oportunidad, en tanto, se tomaría para atender las urgencias devenidas de la delicada situación de la provincia.
La castigada economía argentina está en terapia intensiva. Ya no sólo está sujeta a la inestabilidad de su macroeconomía, sino también a la herida lenta de la cuarentena obligatoria. El parate generalizado de la mayoría de las actividades, no sólo amenaza con abrir las puertas a los despidos masivos y al cierre de empresas pequeñas y medianas; también abre el interrogante sobre el destino de las cuentas públicas y también permite esbozar el destino de los fondos que llegarán .